Alexia Viruez, con su nueva faceta como Magnífica de Pablo Manzoni

Su pasarela fue una de las más admiradas en la décima versión del Bolivia Moda. La Miss Bolivia 2012, Alexia Viruez, que dejó su primera agencia, Promociones Gloria, se encuentra encantada con su nueva faceta como Magnífica de Pablo Manzoni, que no dudó en ofrecer a la modelo una propuesta interesante que la convenció de estar en las filas del afamado fotógrafo. Después de un año y medio de trabajar de manera independiente, confiesa que sí o sí tenía que pasar por las Magníficas "son lo top del país", destaca. Con 21 años, vive con sus padres y ha retomado su carrera de Ingeniería Comercial en la universidad Nur. Con muchos proyectos para el futuro, cuenta que su trabajo no le permite tener una relación sentimental. "Tener una pareja con el modelaje es difícil".

Se define como sencilla, trabajadora y sobre todo perseverante.


Siempre vigente y con cambios estratégicos. La modelo confiesa que ha hecho uso de la televisión y las redes sociales. Actualmente presentadora de televisión de programa de PAT, "Palabras de mujer", trabajó en ATB. "El cambio de fuente laboral fue una decisión de los jefes mayores por una cuestión estratégica. Sin embargo, esto me ha permitido crecer y desarrollar mejor mi rol de presentadora", asevera. Viruez, que agrega que sus todas sus facetas la han llevado a ser una mujer creativa. "Lo más importante es que las personas no pierdan su esencia, si la pierdes también se pierde tu encanto".

Una trayectoria que empezó a sus nueve años. Cuenta que trabajó desde los nueve años en la tienda de ropa de su madre, donde la entonces pequeña Alexia atendía. "Mi madre era auspiciadora de evento del Big Show Infanto Juvenil y ahí mis hermanos, primas y yo desfilábamos. Solo a mí me gustó", recuerda. Reconoce que el modelaje le trajo muchas cosas buenas; sin embargo, lamenta haber dejado sus estudios. "Debí seguir haciéndolo de manera paralela", dice y agrega que ahora se encuentra cursando el tercer semestre de su carrera.

Amante de su familia y con muchos proyectos. Aunque aún vive en la casa de su padre, ella se mantiene sola. "Soy independiente económicamente. Pago todos mis gastos", indica. "Cada día voy creciendo más, aunque a veces también me quiero descarriar", dice entre risas. "Pero trato de cumplir con todos los compromisos que tengo".

Sueña con hacer un proyecto social que ayude a los niños enfermos de escasos recursos; idea que nació al vivir una experiencia en un hospital donde iba a ver a una persona. "Ahí conocí a unos niños que murieron por falta de medicamentos. Ellos necesitaban cosas básicas como suero", lamenta. Entre sus otros proyectos, busca ser parte de agencias internacionales. "todo tiene límites de edad y yo ya voy entrando al tope", concluye.